¿CÓMO ESTÁN MIS CHICAS?
Hoy vengo a hablaros de algunos falsos mitos que se dicen sobre el ejercicio y las mujeres embarazadas, porque últimamente han venido futuras mamás al gimnasio a preguntar por las clases que impartimos adaptadas a mujeres en este estado con varias afirmaciones que no son verdad. Pues bien, hay en concreto unas que circulan sin cesar y van a ser en las que nos centraremos para explicar cuál es su realidad.
“Hacer ejercicio cuando estás embarazada puede provocar un aborto espontáneo”. Vamos a ver chicas… haciendo ejercicio no pones en riesgo tu embarazo, de hecho, todo lo contrario, ya que lo que se recomienda es hacer al menos unos 30 minutos de ejercicio moderado al día, y es que la clave está en la palabra “moderado”. Está claro que no puedes realizar ejercicio como si nada estuviese pasando dentro de ti, tendrías que evitar los deportes o actividades de contacto, ya que, por ejemplo, puedes recibir golpes o encontrarte con algún tipo de ejercicio que presente riesgo de caída.
Otra afirmación que suele escucharse habitualmente es que, “si no practicabas ejercicio físico previamente a quedarte embarazada, no es bueno ponerse a ello en el momento de estarlo.” Eso es totalmente falso, a no ser que tengas un embarazo de riesgo, que incluso con supervisión médica y un profesional cualificado es posible, hacer ejercicio durante el embarazo es vital tanto para la salud física como mental, obviamente realizándolo de una forma adaptada, segura, y quizá hasta individualizada, según el caso.
De lo que no nos podemos olvidar es de que hay varios perfiles de embarazadas que pueden acudir a un centro deportivo: sedentaria, activa y deportista.
Para una sedentaria que no está habituada al ejercicio físico, lo recomendado es practicar actividades que se adapten mejor a sus necesidades, como por ejemplo el entrenamiento personal con un profesional cualificado especialista en embarazo.
Para una mujer activa, lo mejor será entrar en aquellas clases que normalmente practicaba pero con adaptaciones específicas. Una buena actividad y fácil de adaptar es la Clase Combo de Verbena Fémina.
Y para una mujer embarazada deportista, habrá que hacer exactamente lo mismo que para una activa y además se recomienda monitorizar la frecuencia cardíaca en cualquier actividad, (intentando que no suba del 80% de su FCmáx). ¡Recuerda que hay dos corazones bombeando dentro de ti!
Unas afirmaciones que desde luego no son un mito son que, una embarazada tiene, a mayor nivel de actividad física, menor prevalencia a presentar una depresión postparto, menor riesgo de padecer diabetes gestacional, o sufrir un parto por cesárea o parto vaginal instrumentalizado, además hay una mejor recuperación postparto y menos dolores lumbares. Y los beneficios no son solo a nivel materno sino también a nivel fetal.
Lo que quiero decir es que ¡no hay que tener miedo al movimiento!, pero sí llevar un control y las adaptaciones oportunas que aporten seguridad y diversión a los entrenamientos.
Ya sabéis… ¡A disfrutar del ejercicio futuras mamás! ¡No hay nada mejor que mover el body! No os olvidéis de auto cuidaros, ambos lo agradeceréis.
¡Feliz viernes y a por el fin de semana super girls!